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Argentina: Buenos Aires
Cementerio de La Recoleta: Juan José Viamonte
Juan José Viamonte (1774-1843) – un político y militar que luchó durante la Primera Invasión Inglesa con el grado de teniente, y luego de su participación en la Segunda Invasión, fue ascendido a capitán.
Participó del Cabildo abierto del 22 de mayo de 1810 y luego de la revolución participó en las batallas de Suipacha y Guaqui. En esta última batalla no involucró a los 1 500 efectivos a su mando en el combate, ordenando hacer ejercicios militares a escasa distancia del campo de batalla.
Participó en muchas campañas que se realizaron para restablecer el orden en las provincias e intendencias del país. En 1815, fue enviado a Santa Fe, donde sufrió una sublevación encabezada por el caudillo Estanislao López. En 1819 fue nombrado general en jefe del ejército expedicionario de Santa Fe.
En 1821, fue nombrado gobernador sustituto de la Provincia de Buenos Aires (por ausencia del gobernador Martín Rodríguez).
Fue gobernador interino en 1829, justo antes del ascenso al poder de Juan Manuel de Rosas. Volvería a ser gobernador en 1833-1834, pero la influencia del mismo Rosas lo obligó a renunciar y se retiró a la vida privada.
Durante su mandato se dirigió al Papa Pio VII para solicitarle la designación de un obispo para la diócesis de Buenos Aires, vacante desde hacia diesisiete años. Fue la primera vez que un gobernante argentino se dirigía a un Papa en forma oficial.
Poco después del regreso de Rosas al poder, en 1840 emigró a Montevideo. Uno de sus hijos falleció de tuberculosis en Brasil, y otro – Avelino – fue degollado. Viamonte advertía que detrás de lo sucedido estaba la mano de su ex amigo Juan Manuel de Rosas.
Cuando su padre emigró a Uruguay, Avelino decidió permanecer en Buenos Aires. Como no militaba en política, supuso que los simpatizantes de Rosas lo dejarían tranquilo. El no tomó en cuenta el riesgo de ser asesinado y finalmente fue apresado por la Mazorca. Sus hermanas trataron de salvarle la vida y le pidieron ayuda a Manuelita Rosas pero ella se negó a interceder ante su padre, argumentando que este se encontraba muy ocupado. Avelino Viamonte fue fusilado por el solo motivo que su padre había criticado las acciones de Rosas.
Apenado por la muerte de sus dos hijos, Viamonte murió en Montevideo en 1843.
En 1881 los restos de Viamonte fueron traídos a Buenos Aires para ser sepultados en el cementerio de La Recoleta. Por cierto, en la misma bóveda yacen los restos de Luisa Sánchez de Arteaga, considerada la primera pintora argentina.
